Todo lo que te rodea palpita dentro de ti:
sol, tierra, agua, aire.
Por eso hoy te estás volviendo sequía,
mañana, simple, un terremoto,
otro día, el torrencial,
el tercero, la transparencia
que a uno le posibilita
mirarse en el fondo
de tu inmensa profundidad.
Al mismo tiempo toda tú eres
el oído que escucha
cómo bate el mundo
dentro de ti.